Ocho alumnos de la Facultad de Humanidades pusieron fin a su etapa universitaria en una emotiva ceremonia. Los nuevos Gestores Culturales destacaron las enseñanzas y aporte de sus profesores.
Por Maria Gracia Zapata. 14 diciembre, 2017.
Kevin Aguilar García, Maricell Chunga Ruiz, Rolando Flores Vega, Marcia Jiménez Seminario, Gustavo Pacherre Rojas, Carlos Ramírez Vilela, Auri Rengifo Ojeda y Luis Seminario Alvarado; conforman la décimo primera promoción del programa de Historia y Gestión Cultural de la Facultad de Humanidades.
En su discurso de despedida, el doctor Enrique Banús, decano de la Facultad, se dirigió a los alumnos promocionales con las siguientes palabras: “Que el progreso no se haga contra la cultura y tampoco sin la cultura; que ni si quiera se haga con la cultura, sino desde la cultura. Porque desarrollo sin cultura es inhumano y deshumaniza. Vayan y aprendan a difundirla”.
El doctor Banús dejó en claro que el progreso, desde las humanidades, significa construir una sociedad al servicio del ser humano. Además, invitó a los graduados a volver a las aulas cada vez que necesiten reencontrarse con ideas, dialogar o reflexionar. “La facultad y los profesores siempre estaremos aquí para ustedes”, refirió.
En nombre de los alumnos tomó la palabra Kevin Aguilar, delegado de la promoción. Tras contar su propia experiencia en la Facultad, comentó que se trató de “un camino que no fue fácil, con largas amanecidas y proyectos culturales grupales”.
El alumno destacó el aprendizaje que se llevó de cada uno de sus compañeros, recordó las experiencias que vivieron juntos y el crecimiento que tuvieron durante la carrera, tanto en lo académico como a nivel humano. “Empezamos un nuevo camino, con nuevas metas que nos llevarán por rumbos insospechados. Siempre seguiremos siendo parte de una facultad tan importante como esta”, expresó.
Finalmente, la magíster Cristina Vargas, directora del programa académico de Historia y Gestión Cultural, felicitó a los egresados por haberse convertido en firmes defensores del arte, las tradiciones y la identidad de los pueblos; honrando y respetando el patrimonio material e inmaterial y la diversidad cultural de las comunidades.
“No olviden nunca que trabajarán con algo muy delicado como es la cultura, que es la base del ser humano, su reflejo y su creación. Por ello, será fundamental el uso de su mejor sentido crítico o de discernimiento, su mayor rigurosidad científica para conocerla y su mejor sentido ético para aprenderla”, afirmó.
La familiar ceremonia incluyó un video con testimonios de los profesores de la Facultad y fotografías de los alumnos a lo largo de estos cinco años de carrera, reviviendo los mejores momentos de su etapa universitaria.
